A partir de abril se iniciará una campaña para informar a los dueños de las posibles consecuencias legales de tener el automóvil en el «limbo»
El Ministerio del Interior, a través de la Dirección General de Tráfico (DGT), se ha comprometido a enviar a partir de abril una carta a los propietarios de coches con baja temporal para informarles de la situación, por si se da la circunstancia de que alguno de ellos piense que sus vehículos están achatarrados y en realidad son coches zombis que han vuelto a circular por las carreteras sin que ellos sean conscientes de esta situación. En la comunicación se les informará de su situación legal y de los problemas en los que puede incurrir si su automóvil llegase a ser mal utilizado.
Más de 400.000 vehículos aparecen registrados en Tráfico como bajas temporales de más de 5 años, lo que invita a deducir que en realidad esos automóviles ya no existen físicamente, y que los han hecho desaparecer una vez despiezados. Desde la DGT alertan de que desde el año 2004 (cuando se introdujo la obligación de llevar el vehículo al Centro Autorizado de Tratamiento -CAT-) este tipo de bajas se ha incrementado considerablemente, pasando de ser un 5% de las bajas al 15% actual, dato que les hace pensar que muchos de estos automóviles puede que ya no existan o que hayan sido desguazados de forma fraudulenta para vender las piezas.
Durante estos años se ha detectado que esta figura de la baja temporal se ha utilizado para amparar la actividad de los desguaces irregulares que tratan de evadir la obligación de achatarrarlo conforme a criterios ambientales.
La operativa que se está detectando es que el ciudadano entrega su vehículo, sin saberlo, a un desguace ilegal con la confianza de que el mismo será retirado de la circulación de forma definitiva. Sin embargo estos desguaces irregulares solicitan la «baja temporal» y de esa manera evitan descontaminar las partes del vehículo con materiales tóxicos en el caso de desguazarlos o, incluso, pueden dar un nuevo destino al vehículo o a sus piezas a terceros países.
Según Rafael Pardo, Director General de Aedra ( Asociación Española de Desguazadores y Reciclajes del Automóvil), en España, durante los últimos anos ha crecido de forma exponencial el número de bajas temporales, lo que denota que esta figura está siendo utilizada para desguazar vehículos de forma ilegal mientras se elude el pago del correspondiente impuesto de circulación «produciendo con ello daños no solamente al sector de los Centros Autorizados de Tratamiento o CAT, que en su mayoría representa Aedra, sino también a toda la sociedad, que sufre la merma en ingresos fiscales».
Esta práctica también supone, según Pardo, una «competencia desleal flagrante y, sobre todo, el descontrol derivado del despiece de vehículos sin respetar el mas mínimo tratamiento y praxis medioambiental para, a continuación, poner a la venta piezas y componentes sin control de calidad ni garantía para el comprador, ya sea particular o profesional».
La nueva comunicación de la DGT pone en guardia a los propietarios de los vehículos para evitar que seanobjeto de engaño y a los infractores les informará de sus responsabilidades. Por ello la Asociación de desguazadores se felicita por una medida que consideran muy acertada y que desde su punto de vista supone un primer paso, decisivo, para erradicar esta problemática, aunque no sea el último.
Reglamento de Vehículos
En este sentido, Aedra considera imprescindible seguir trabajando para que el futuro Reglamento de Vehículos recoja una completa y adecuada regulación de las bajas temporales. De cara a su elaboración, Aedra, junto a Sigrauto y el resto de socios, ha propuesto medidas que acaben con abusos de esta naturaleza y aseguren que una baja temporal sea realmente temporal.
Es decir, que transcurridos uno o dos años de su puesta en marcha se reactive el alta de forma automática, generando el correspondiente Impuesto de Circulación; que la baja temporal no exceda de un periodo concreto; que no implique la exoneración total en el pago del citado impuesto (solamente de una parte) durante su vigencia y que implique una declaración jurada del titular en la que manifieste el lugar donde será depositado el vehículo durante el periodo de baja temporal. La Asociación matiza, no obstante, que no está en contra de las bajas temporales, sino contra el abuso de ellas, y contra los que burlan la ley con prácticas fraudulentas causan daños a todos.